"Ocurre que el alimento está casi resuelto -son cada vez menos las familias que se acercan a la comuna a buscar su sustento- y ahora la necesidad pasa por un stándard más elevado como es el techo propio", aseguró el funcionario a LA BISAGRA.
"La intención es continuar con la estricta relacion con el destinatario de una vivienda social porque, generalmente, tras la entrega de la se pierde el vínculo entre el beneficiario y la Municipalidad y para evitar algún inconveniente, se mantendrá el contacto", detalló.
Zaballa habló de una "coordinación conjunta y un trabajo mancomunado entre las distintas secretarias comunales pra implementar otras políticas que va generando el gobierno local".